DONACIÓN DE LA CASA DE CALLE H.YRIGOYEN
En 1940 surge una gran posibilidad para el Club, la de contar con sede social propia: a tal efecto, un ex jugador del Club, el Dr. Eduardo Prieto, junto a sus hermanas, le donaron una casa que perteneciera a su padre, don Anastasio Prieto, ubicada en calle H. Yrigoyen frente plaza Belgrano (hoy ISETA),
El 31 de diciembre de 1940 se firmó la escritura en la ciudad de Buenos Aires, ante el Escribano Luis F. Catalá, con el cargo de que tuviera una biblioteca con el nombre del padre de los donantes.-
El Ingeniero Luis Herbín realiza el proyecto y el 11 de mayo de 1948 por asamblea extraordinaria se autoriza formalmente a la C.D. para firmar la escritura del préstamo hipotecario gestionado dentro del Programa Nacional de Fomento del Deporte.- Hechos los trámites pertinentes, por decreto del Presidente de la Nación, que lleva el N° 10.128 se le concedió al Club un préstamo por $ 270.000, para la construcción de su sede social.-
El control y apoyo económico de directivos y socios es enorme, no dejando que el atraso en los giros del Banco Central provoque la demora en el plan de obras; en el año 1956 se reúnen nuevos fondos por la venta de terrenos, colocación de Bonos y con recursos propios del Club, de modo que se encara la terminación de la obra, aunque limitada a la planta baja.- Previendo la finalización, se empiezan a comprar muebles, artefactos eléctricos, cortinados, etc. para ir teniendo todo lo necesario para habilitar la sede.-
INAUGURACIÓN DE LA PRIMERA SEDE SOCIAL PROPIA
La inauguración de la Sede Social, realizada el 8 de diciembre de 1956, significó un acontecimiento social para la ciudad, con la presencia del vecindario, Autoridades locales y Provinciales, directivos y gran cantidad de asociados, que veían como después de tantos años se lograba por fin, la casa propia.- Al mismo tiempo y con la presencia de los familiares de Anastasio Prieto, se inauguró la Biblioteca que lleva su nombre.-
Se construyó al frente, la secretaría y una amplia confitería, denominada “Salón de Invierno”; un gran hall central que vinculaba a la biblioteca, al salón de juegos, con billares y mesas para cartas, ajedrez y reuniones, con servicio de buffet, una peluquería y baños; además contaba con un subsuelo, lugar donde al poco tiempo funcionaría el Teatro vocacional de la institución.- Más un patio, al fondo, donde luego se harían las canchas de bochas.-
EL SALON EN LA PLANTA ALTA
Por razones presupuestarias y de ansiedad por disponer de la planta alta, en 1960 se resuelve instalar un quincho, terminando pronto con las obras, que quedaron habilitadas por lo menos para reuniones bailables, que a partir de este año y con el nuevo escenario adquieren un auge notable, congregando grandes cantidades de público y no sólo para el carnaval, como era costumbre, sino durante todo el año.-
Años más tarde se encara la construcción del salón en la planta alta, de 14 metros por 43,30.- A fines del año 1966 ya se habían invertido $ 3.500.000, que fueron obtenidos a través de dos créditos y de una rifa, calculándose un costo final de alrededor de $ 9.000.000.-
El 14 de octubre de 1967 la C.D. autoriza a la sub comisión de basquetbol el uso de la planta alta, donde se instalan los aros, se marca la cancha y de inmediato queda habilitado el “Piso de Deportes”, donde se realizaría todo tipo de actividades, tanto deportivas como sociales.-
VENTA DE LA SEDE
Veinte años después surge otra posibilidad y una gran discusión: el Gobierno Provincial ofrece comprar el edificio.- Hay sectores a favor y en contra, se discute mucho y se convoca a asamblea extraordinaria para el 24 de mayo de 1978 para que resuelva: con una numerosa concurrencia y luego de arduas deliberaciones, por mayoría se resolvió la venta de la Sede para poder construir una nueva en el Estadio y concentrar allí toda la actividad deportiva, social y administrativa.-
Según lo resuelto en asamblea, fue vendida al Ministerio de Educación para el funcionamiento del ISETA y escriturada el 10 de agosto. El Club, después de 22 años de vida en ese lugar, tuvo que desocupar y ubicar a las actividades, mobiliarios, biblioteca, trofeos y documentación, hasta que se ubicaron en la nueva sede social levantada en el Estadio.